De la miseria a ser dueña de una remisería

Sandra Addur estaba indignada con su situación, cuando aprendió a usar su fe de manera inteligente, logró un cambio completo en su vida. Antes de participar de las reuniones del Cenáculo del Espíritu Santo enfrentaba una difícil situación económica. No tenían dinero, su esposo tomaba y salía mucho,  solo regresaba los lunes. La situación se agravaba con el paso del tiempo, hasta que llegó a una situación extrema en que sus vecinos y familiares le daban alimentos.

Cuando se determinó a cambiar su situación comenzó a participar de las reuniones, de los propósitos y campañas buscando la bendición de Dios para su vida. Entonces, primero su esposo cambió, dejó las malas compañías, y luego comenzaron las conquistas. Compró vehículos y estableció su propio negocio, una remisería con autos propios. Desde entonces ya no atraviesa necesidades, sino que vive una vida abundante junto a su familia.

Venga a participar este lunes de la Nación de Vencedores, a las 20hs en Av. Corrientes 4070 – Almagro