Libérese del pasado

Piense en las personas que lograron cosas extraordinarias, como llegar a la Luna, descubrir la electricidad o inventar la televisión, ¿lo habrán logrado en el primer intento? Claro que no, pero como tenían una meta y sabían dónde querían llegar, intentaron muchas veces, hasta que lo lograron.

Estas personas no reparaban en las fallas del pasado, todo lo contrario, sacaban de esos errores la fuerza para seguir intentando.

Quizá su pasado lo ha lastimado y le provoca miedo para volver a intentar. La Biblia dice: “Mi siervo Moisés ha muerto; ahora, pues, levántate y pasa este Jordán, tú y todo este pueblo, a la tierra que yo les doy a los hijos de Israel.”, (Josué 1:2). Lo que Dios tenía para Josué es lo mismo que tiene hoy para usted. Él ha puesto cosas grandes delante nuestro, pero el problema está en mirar hacia atrás. Josué miraba hacia la muerte de Moisés; usted mira hacia una mala experiencia económica que tuvo en el pasado.

Yo creo que Dios ha preparado para usted algo mucho más grande de lo que usted pueda imaginar, pero por una decepción del pasado usted ha dejado de mirar hacia delante. ¿Va a aceptar una vida atada? No, usted debe olvidarse del pasado, debe tomar esas decepciones como experiencia para el futuro.

La fe exige trabajo y actividad constante, por eso no puede ser teórica, debe ser puesta en práctica. Las conquistas son resultado de la sociedad entre el hombre y Dios.

En esa sociedad, el Espíritu de Dios viene sobre el hombre y lo capacita, para realizar aquello que le era imposible. El hombre, por su parte, debe tomar actitudes para cambiar la situación. Cuanto más lejos quiera llegar, más grande será el sacrificio que deberá hacer.

Hay muchas personas fuertes y capaces, pero que están atadas al pasado. Ellos piensan que todas sus iniciativas están destinadas al fracaso. Es mejor fracasar intentando que quejarse de brazos cruzados.

Si usted está luchando por algo nuevo, libérese de las experiencias negativas del pasado, ábrase a lo nuevo, intégrese al proceso de cambio. El futuro le pertenece a Dios; al diablo, el pasado. Pero el presente es suyo. Tome una actitud ahora y dé el primer paso hacia ese gran objetivo que tiene en mente.

Participe este lunes a las 20 y dispóngase a luchar por su éxito económico. Lo esperamos en Av. Corrientes 4070.